Navidad en Orión
En la inmensidad del espacio, a bordo de la nave Orión 5, la humanidad viaja hacia un nuevo hogar. Pero en este mundo de metal y tecnología, algo ha quedado en el olvido: la Navidad.
El almirante Smith se enfrenta a un desafío inesperado: revivir una tradición perdida entre las estrellas: celebrar la Navidad en Orión.
El almirante Smith observaba las estrellas desde la pequeña ventana de su camarote en la Orión 5. Afuera, la inmensidad del espacio se extendía como un océano de sombras y luces distantes. Hacía décadas que la nave había partido, y con ella, sus pasajeros habían dejado atrás más que un planeta: habían olvidado sus antiguas tradiciones.
Pero todo cambió aquella noche, cuando dos pequeños torbellinos irrumpieron en su habitación.
—¡Abuelo, abuelo! ¿Qué son las Navidades? —preguntó Luisa, con ojos llenos de curiosidad.
Smith se quedó en silencio. La palabra resonó en su mente como un eco lejano. Navidad. Una celebración que pertenecía a un mundo que ya no existía, a una historia que había quedado en el olvido.
—Navidad… —murmuró—. Era una noche especial. Había luces, canciones, un árbol enorme y… regalos.
—¿Y por qué no la celebramos, abuelo? ¿Podemos hacerlo?
Las voces de los niños se convirtieron en el detonante de algo inesperado. Iban a celebrar la Navidad en Orión. La noticia se esparció por la nave como fuego en la pólvora, y de pronto, en un rincón del universo donde los días y las noches eran artificiales, el espíritu navideño volvió a encenderse. Un árbol improvisado, nieve artificial y una melodía olvidada transformaron la nave en algo más que un punto errante en el espacio.
Poco a poco, los compartimentos grises se llenaron de luces cálidas, risas infantiles y aromas simulados a canela. La tripulación recordó que la esperanza también viaja, incluso cuando la Tierra queda atrás.
Por primera vez en años, la Orión 5 dejó de ser solo un destino y se convirtió en un hogar.
Puedes leer más relatos de ciencia ficción.